PEREGRINO DE SANTIAGO

ALIENTOS PARA EL CAMINO

"Mi pasado Señor lo confío a tu misericordia,
mi presente a tu amor,
mi futuro a tu providencia"

domingo, 2 de diciembre de 2012

DICIEMBRE 2 - I DOMINGO DE ADVIENTO

PREPARANDO EL CAMINO DEL SEÑOR


Este inicio de un Nuevo Año Litúrgico ha sido ocasión propicia para darle en nuestra parroquia una fuerza especial al Año de la Fe que se vive en la Iglesia. Comenzar un Nuevo Calendario de celebraciones motiva el deseo de preparar bien cada encuentro con Jesús, desear que cada sacramento y sobre todo la Eucaristía sean el centro de la Vida del Discípulo de Jesús.

Se realizó en cada misa un diálogo entre laicos y presbítero sobre la Fe: Su nacimiento - crecimiento - conocimiento; y por cada interrogante expresado y respuesta dada se entregaba la Escritura Santa - Los Documentos del Concilio Vaticano II - El Catecismo de la Iglesia Católica. Se escogieron estos tres textos porque son puntos de referencia básicos para fomentar la FE, a su vez el Papa Benedicto nos ha motivado a este Año de la Fe, por los 50 años del Vaticano II y los 20 años de la publicación del Nuevo Catecismo.

Aprovechemos pues este Nuevo Año para conocer y amar más a Jesucristo, Nuestro Único Salvador. El Tiempo del Adviento tiene como súplica central: VEN SEÑOR JESÚS¡¡¡ Pero nuestra súplica va acompañada de la virtud de la esperanza, pero nuestra espera no es pasiva, aguardamos con atención-vigilancia. Una manera de estar vigilantes es conocer más nuestra fe, para que vientos impetuosos no la apaguen en nuestro corazón, conozcamos nuestra fe desde la Sagrada Escritura - El Magisterio Episcopal - El Catecismo Católico.


LITURGIA DE LA PALABRA
Lectura del libro de Jeremías (33,14-16):

Mirad que llegan días –oráculo del Señor– en que cumpliré la promesa que hice a la casa de Israel y a la casa de Judá. En aquellos días y en aquella hora suscitaré a David un vástago legítimo, que hará justicia y derecho en la tierra. En aquellos días se salvará Judá y en Jerusalén vivirán tranquilos, y la llamarán así: Señor-nuestra-Justicia.

Palabra de Dios
Salmo
Sal 24 

R/.
 A ti, Señor, levanto mi alma

Señor, enséñame tus caminos,
instrúyeme en tus sendas,
haz que camine con lealtad;
enséñame, porque tú eres
mi Dios y Salvador. R/.

El Señor es bueno y recto,
y enseña el camino a los pecadores;
hace caminar a los humildes con rectitud,
enseña su camino a los humildes. R/.

Las sendas del Señor son misericordia y lealtad,
para los que guardan su alianza y sus mandatos.
El Señor se confía con sus fieles
y les da conocer su alianza. R/.
Segunda lectura
Lectura de la primera carta del apóstol san Pablo a los Tesalonicenses (3,12–4,2)

Que el Señor os colme y os haga rebosar de amor mutuo y de amor a todos, lo mismo que nosotros os amamos. Y que así os fortalezca internamente; para que, cuando Jesús nuestro Señor vuelva acompañado de todos sus santos, os presentéis santos e irreprensibles ante Dios nuestro padre. Para terminar, hermanos, por Cristo Jesús os rogamos y exhortamos: habéis aprendido de nosotros como proceder para agradar a Dios: pues proceded así y seguid adelante. Ya conocéis las instrucciones que os dimos en nombre del Señor Jesús.

Palabra de Dios
Evangelio
Lectura del santo Evangelio según san Lucas (21,25-28.34-36):

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «Habrá signos en el sol y la luna y las estrellas, y en la tierra angustia de las gentes, enloquecidas por el estruendo del mar y del oleaje. Los hombres quedarán sin aliento por el miedo y la ansiedad, ante lo que se le viene encima al mundo, pues los astros temblarán. Entonces, verán al Hijo del Hombre venir en una nube, con gran poder y majestad. Cuando empiece a suceder esto, levantaos, alzad la cabeza; se acerca vuestra liberación.»

Palabra del Señor

domingo, 25 de noviembre de 2012

NOVIEMBRE 25 - DOMINGO DE CRISTO REY DEL UNIVERSO

BENDITO SEA NUESTRO REY

Hemos llegado al último de nuestros Domingos del Tiempo Ordinario, hemos pasado un año contemplando de diversos modos la grandeza de Jesucristo, hoy con más atención alabamos su condición de REY, de Señor, Dueño de todo.

Hoy es un día para consagrarle de nuevo la Vida que nos regala, dejar que Él guíe nuestros proyectos, nuestros sueños. Hoy contemplamos a nuestro Rey singular y le expresamos que queremos ser mejores siervos suyos.

Los invito a leer la Pasión según san Juan, de la cual escuchamos hoy un aparte, desde la afirmación: JESÚS ES REY. El IV Evangelista ha organizado este momento singular y central en la Vida y Ministerio de Jesús, en torno a su diálogo con Pilato, donde se quiere poner de manifiesto la condición Real del Mesías. Jesús le expresa que su reino no es de este mundo - es sentado con manto/cetro/corona de espinas en la sede del delegado Romano - El título de su condena, escrito en la lengua del imperio (latín) - la común (griego) - la religiosa (Hebreo) - Jesús sube a su trono con dignidad - Es puesto en un sepulcro nuevo en un jardín. Para el Evangelista es clara la novedad del reinado del Mesías: Siervo - Sufriente - Paciente.

Tenemos un Rey muy distinto de lo que nos ofrece la historia universal y el mundo actual; pero nuestra mayor certeza es que este Rey vive por los siglos y su modo de actuar es motivo para nosotros saber qué espera de nosotros.


Oh Jesús! Te reconozco por Rey Universal. 
Todo cuanto ha sido hecho Tú lo has creado. 
Ejerce sobre mí todos tus derechos. 
Renuevo las promesas de mi bautismo, renunciado a Satanás, 
a sus seducciones y a sus obras; y prometo vivir como buen cristiano. 
Muy especialmente me comprometo a procurar, según mis medios, 
el triunfo de los derechos de Dios y de tu Iglesia.
Divino Corazón de Jesús, te ofrezco mis pobres obras 
para conseguir que todos los corazones reconozcan tu sagrada realeza,
y para que así se establezca en todo el mundo el Reino de tu Paz.

LITURGIA DE LA PALABRA

Primera lectura
Lectura de la profecía de Daniel (7,13-14):

Mientras miraba, en la visión nocturna vi venir en las nubes del cielo como un hijo de hombre, que se acercó al anciano y se presentó ante él. Le dieron poder real y dominio; todos los pueblos, naciones y lenguas lo respetarán. Su dominio es eterno y no pasa, su reino no tendrá fin.

Palabra de Dios
Salmo
Sal 92,1ab.1c-2.5

R/.
 El Señor reina, vestido de majestad

El Señor reina, vestido de majestad,
el Señor, vestido y ceñido de poder. R/.

Así está firme el orbe y no vacila.
Tu trono está firme desde siempre,
y tú eres eterno. R/.

Tus mandatos son fieles y seguros;
la santidad es el adorno de tu casa,
Señor, por días sin término. R/.
Segunda lectura
Lectura del libro del Apocalipsis (1,5-8):

Jesucristo es el testigo fiel, el primogénito de entre los muertos, el príncipe de los reyes de la tierra. Aquel que nos ama, nos ha librado de nuestros pecados por su sangre, nos ha convertido en un reino y hecho sacerdotes de Dios, su Padre. A él la gloria y el poder por los siglos de los siglos. Amén. Mirad: Él viene en las nubes. Todo ojo lo verá; también los que lo atravesaron. Todos los pueblos de la tierra se lamentarán por su causa. Sí. Amén. Dice el Señor Dios: «Yo soy el Alfa y la Omega, el que es, el que era y el que viene, el Todopoderoso.»

Palabra de Dios
Evangelio
Lectura del santo evangelio según san Juan (18,33b-37):

En aquel tiempo, dijo Pilato a Jesús: «¿Eres tú el rey de los judíos?»
Jesús le contestó: «¿Dices eso por tu cuenta o te lo han dicho otros de mí?»
Pilato replicó: «¿Acaso soy yo judío? Tu gente y los sumos sacerdotes te han entregado a mí; ¿qué has hecho?»
Jesús le contestó: «Mi reino no es de este mundo. Si mi reino fuera de este mundo, mi guardia habría luchado para que no cayera en manos de los judíos. Pero mi reino no es de aquí.»
Pilato le dijo: «Conque, ¿tú eres rey?»
Jesús le contestó: «Tú lo dices: soy rey. Yo para esto he nacido y para esto he venido al mundo; para ser testigo de la verdad. Todo el que es de la verdad escucha mi voz.»

Palabra del Señor

domingo, 18 de noviembre de 2012

NOVIEMBRE 18 - DOMINGO XXXIII DEL TIEMPO ORDINARIO

EL VALOR DEL FIN

Estos últimos días del Tiempo Ordinario nos ponen como tema la reflexión sobre el FIN. Los cristianos concebimos la historia como un proceso que tiene un inicio y un término, entre Nuestro Señor y Nosotros se va construyendo una relación viva que va dejando huellas; pero no caminamos a la deriva, confiamos en que el Omnisciente dirige su Plan Salvador y éste no dejará de realizarse.

Humanamente podemos experimentar la experiencia sobre el FIN; creo que vale la pena valorar esta palabra, pues muchas personas pueden verla negativa. Para alguno, FIN puede ser sólo sinónimo de destrucción - frustración - sin sentido; pero una comprensión amplia del término nos habla de realización - llegar a la meta - cumplir un objetivo. Lo digo claramente: NO PODEMOS VIVIR SIN FIN - TODOS TENEMOS UN FIN POR REALIZAR. Nuestro fines marcan nuestras rutas, sabemos para dónde vamos y cómo vamos cuando tenemos un FIN: Estudio - Familia - Viaje.

Como creyentes esperamos el FIN como consumación de la obra de Dios N.S.; no aguardamos el fin como el acabose frustrante, el pavor por lo que no se pudo hacer. Esperamos el fin como la oportunidad para que Reine la Santa Trinidad, para que el mal se acabe, para que todo sea más alegre y más bello. Este es el entusiasmo que nos trasmiten las lecturas de hoy, de modo especial centrémonos en tres afirmaciones que Jesús nos da y son útiles para vivir como discípulos suyos el FIN:

- APRENDER DE LA HIGUERA: Este árbol vive las estaciones, siente que muere en el invierno y revive en la primavera. A pesar de las tribulaciones del mundo, nuestro destino es dar fruto eterno.

- MIS PALABRAS NO PASARÁN: Jesús nos asegura la fidelidad de sus Palabras, nuestras palabras son pasajeras y muy cambiantes, la Palabra de Dios, la promesa de salvación es irrevocable, Dios N.S. nos quiere con Él.

- SOLO EL PADRE SABE EL FIN: La datación de la consumación-fin no debe inquietarnos, no nos pertenece; nuestra preocupación no es el cuándo, sino el esperar, saber aguardar activa y cristianamente que vuelva quien nos da vida - paz - dicha.



LITURGIA DE LA PALABRA

Primera lectura
Lectura de la profecía de Daniel (12,1-3):

Por aquel tiempo se levantará Miguel, el arcángel que se ocupa de tu pueblo: serán tiempos difíciles, como no los ha habido desde que hubo naciones hasta ahora. Entonces se salvará tu pueblo: todos los inscritos en el libro. Muchos de los que duermen en el polvo despertarán: unos para vida eterna, otros para ignominia perpetua. Los sabios brillarán como el fulgor del firmamento, y los que enseñaron a muchos la justicia, como las estrellas, por toda la eternidad.

Palabra de Dios
Salmo
Sal 15,5.8.9-10.11

R/.
 Protégeme, Dios mío, que me refugio en ti

El Señor es el lote de mi heredad y mi copa;
mi suerte está en tu mano.
Tengo siempre presente al Señor,
con él a mi derecha no vacilaré. R/.

Por eso se me alegra el corazón,
se gozan mis entrañas,
y mi carne descansa serena.
Porque no me entregarás a la muerte,
ni dejarás a tu fiel conocer la corrupción. R/.

Me enseñarás el sendero de la vida,
me saciarás de gozo en tu presencia,
de alegría perpetua a tu derecha. R/.
Segunda lectura
Lectura de la carta a los Hebreos (10,11-14.18):

Cualquier otro sacerdote ejerce su ministerio, diariamente ofreciendo muchas veces los mismos sacrificios, porque de ningún modo pueden borrar los pecados. Pero Cristo ofreció por los pecados, para siempre jamás, un solo sacrificio; está sentado a la derecha de Dios y espera el tiempo que falta hasta que sus enemigos sean puestos como estrado de sus pies. Con una sola ofrenda ha perfeccionado para siempre a lo que van siendo consagrados. Donde hay perdón, no hay ofrenda por los pecados.

Palabra de Dios
Evangelio
Lectura del santo evangelio según san Marcos (13,24-32):

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «En aquellos días, después de esa gran angustia, el sol se hará tinieblas, la luna no dará su resplandor, las estrellas caerán del cielo, los astros se tambalearán. Entonces verán venir al Hijo del hombre sobre las nubes con gran poder y majestad; enviará a los ángeles para reunir a sus elegidos de los cuatro vientos, de horizonte a horizonte. Aprended de esta parábola de la higuera: Cuando las ramas se ponen tiernas y brotan las yemas, deducís que el verano está cerca; pues cuando veáis vosotros suceder esto, sabed que él está cerca, a la puerta. Os aseguro que no pasará esta generación antes que todo se cumpla. El cielo y la tierra pasarán, mis palabras no pasarán, aunque el día y la hora nadie lo sabe, ni los ángeles del cielo ni el Hijo, sólo el Padre.»

Palabra del Señor

domingo, 11 de noviembre de 2012

NOVIEMBRE 11 - DOMINGO XXXII DEL TIEMPO ORDINARIO

DIOS LO QUIERE TODO

Mirando a las Viudas de la Palabra Santa de este día, cómo no contemplar su DONACIÓN TOTAL??? El verdadero culto no pide cosas, el Señor no necesita materia, necesita corazones, nuestros corazones...

¿Qué le quiero ofrecer mejor a quien tanto me ama?????


LITURGIA DE LA PALABRA


Lectura del primer libro de los Reyes (17,10-16):

En aquellos días, el profeta Elías se puso en camino hacia Sarepta, y, al llegar a la puerta de la ciudad, encontró allí una viuda que recogía leña. La llamó y le dijo: «Por favor, tráeme un poco de agua en un jarro para que beba.»
Mientras iba a buscarla, le gritó: «Por favor, tráeme también en la mano un trozo de pan.»
Respondió ella: «Te juro por el Señor, tu Dios, que no tengo ni pan; me queda sólo un puñado de harina en el cántaro y un poco de aceite en la alcuza. Ya ves que estaba recogiendo un poco de leña. Voy a hacer un pan para mí y para mi hijo; nos lo comeremos y luego moriremos.»
Respondió Elías: «No temas. Anda, prepáralo como has dicho, pero primero hazme a mí un panecillo y tráemelo; para ti y para tu hijo lo harás después. Porque así dice el Señor, Dios de Israel: "La orza de harina no se vaciará, la alcuza de aceite no se agotará, hasta el día en que el Señor envíe la lluvia sobre la tierra."»
Ella se fue, hizo lo que le había dicho Elías, y comieron él, ella y su hijo. Ni la orza de harina se vació, ni la alcuza de aceite se agotó, como lo había dicho el Señor por medio de Elías.

Palabra de Dios
Salmo
Sal 145,7.8-9a.9bc-10

R/.
 Alaba, alma mía, al Señor

Que mantiene su fidelidad perpetuamente,
que hace justicia a los oprimidos,
que da pan a los hambrientos.
El Señor liberta a los cautivos. R/.

El Señor abre los ojos al ciego,
el Señor endereza a los que ya se doblan,
el Señor ama a los justos,
el Señor guarda a los peregrinos. R/.

Sustenta al huérfano y a la viuda
y trastorna el camino de los malvados.
El Señor reina eternamente,
tu Dios, Sión, de edad en edad. R/.
Segunda lectura
Lectura de la carta a los Hebreos (9,24-28):

Cristo ha entrado no en un santuario construido por hombres imagen del auténtico, sino en el mismo cielo, para ponerse ante Dios, intercediendo por nosotros. Tampoco se ofrece a sí mismo muchas veces como el sumo sacerdote, que entraba en el santuario todos los años y ofrecia sangre ajena; si hubiese sido así, tendría que haber padecido muchas veces, desde el principio del mundo. De hecho, él se ha manifestado una sola vez, al final de la historia, para destruir el pecado con el sacrificio de sí mismo. Por cuanto el destino de los hombres es morir una sola vez. Y después de la muerte, el juicio. De la misma manera, Cristo se ha ofrecido una sola vez para quitar los pecados de todos. La segunda vez aparecerá, sin ninguna relación al pecado, a los que lo esperan, para salvarlos. 

Palabra de Dios
Evangelio
Lectura del santo evangelio según san Marcos (12,38-44):

En aquel tiempo, entre lo que enseñaba Jesús a la gente, dijo: «¡Cuidado con los escribas! Les encanta pasearse con amplio ropaje y que les hagan reverencias en la plaza, buscan los asientos de honor en las sinagogas y los primeros puestos en los banquetes; y devoran los bienes de las viudas, con pretexto de largos rezos. Éstos recibirán una sentencia más rigurosa.»
Estando Jesús sentado enfrente del arca de las ofrendas, observaba a la gente que iba echando dinero: muchos ricos echaban en cantidad; se acercó una viuda pobre y echó dos reales. 
Llamando a sus discípulos, les dijo: «Os aseguro que esa pobre viuda ha echado en el arca de las ofrendas más que nadie. Porque los demás han echado de lo que les sobra, pero ésta, que pasa necesidad, ha echado todo lo que tenía para vivir.»

Palabra del Señor

domingo, 4 de noviembre de 2012

NOVIEMBRE 4 - DOMINGO XXXI DEL TIEMPO ORDINARIO

FE Y MANDAMIENTOS

Aprovechando nuestro Año de la Fe, procuremos leer la Escritura de este Domingo bajo la óptica de la relación FE - MANDAMIENTOS.

¿Basta concebir la Fe como un sentimiento? ¿Fe es solo confiar que Dios me va a dar?

La lectura del Deuteronomio nos ayuda a ver cómo el Pueblo de Israel se compromete a responder con los mandamientos al Amor que el Señor le tiene y que se ha mostrado en la Pascua y el Camino del Desierto. Jesús le ratifica al Doctor de la Ley que el Amor a Dios y al prójimo es el principal de los Mandamientos.

La Fe es relación con Dios sustancialmente, y esta relación tan bella está sustentada por los Mandamientos, las orientaciones para vivir bien este vínculo, para hacer una alianza. Toda amistad, sin que se enuncien directamente, vive en unas reglas de amor (respeto, honestidad, justicia, etc); ¿cómo no pensar que Dios N.S. espera también de nosotros una vida bella?

No podemos separar la Fe de la Vida. Para un cristiano la Fe en Dios le marca una manera de sentir - ver - reflexionar sobre lo que le rodea.


LITURGIA DE LA PALABRA

Primera lectura
Lectura del libro del Deuteronomio (6,2-6):

En aquellos días, habló Moisés al pueblo, diciendo: «Teme al Señor, tu Dios, guardando todos sus mandatos y preceptos que te manda, tú, tus hijos y tus nietos, mientras viváis; así prolongarás tu vida. Escúchalo, Israel, y ponlo por obra, para que te vaya bien y crezcas en número. Ya te dijo el Señor, Dios de tus padres: "Es una tierra que mana leche y miel." Escucha, Israel: El Señor, nuestro Dios, es solamente uno. Amarás al Señor, tu Dios, con todo el corazón, con toda el alma, con todas las fuerzas. Las palabras que hoy te digo quedarán en tu memoria.»

Palabra de Dios
Salmo
Sal 17

R/.
 Yo te amo, Señor; tú eres mi fortaleza.

Yo te amo, Señor; tú eres mi fortaleza;
Señor, mi roca, mi alcázar, mi libertador. R/.

Dios mío, peña mía, refugio mío, escudo mío,
mi fuerza salvadora, mi baluarte. 
Invoco al Señor de mi alabanza
y quedo libre de mis enemigos. R/.

Viva el Señor, bendita sea mi Roca,
sea ensalzado mi Dios y Salvador.
Tú diste gran victoria a tu rey,
tuviste misericordia de tu Ungido. R/.
Segunda lectura
Lectura de la carta a los Hebreos (7,23-28):

Ha habido multitud de sacerdotes del antiguo testamento, porque la muerte les impedía permanecer; como éste, en cambio, permanece para siempre, tiene el sacerdocio que no pasa. De ahí que puede salvar definitivamente a los que por medio de él se acercan a Dios, porque vive siempre para interceder en su favor. Y tal convenía que fuese nuestro sumo sacerdote: santo, inocente, sin mancha, separado de los pecadores y encumbrado sobre el cielo. Él no necesita ofrecer sacrificios cada día «como los sumos sacerdotes, que ofrecían primero por los propios pecados, después por los del pueblo,» porque lo hizo de una vez para siempre, ofreciéndose a sí mismo. En efecto, la Ley hace a los hombres sumos sacerdotes llenos de debilidades. En cambio, las palabras del juramento, posterior a la Ley, consagran al Hijo, perfecto para siempre.

Palabra de Dios
Evangelio
Lectura del santo evangelio según san Marcos (12,28b-34):

En aquel tiempo, un escriba se acercó a Jesús y le preguntó: «¿Qué mandamiento es el primero de todos?» 
Respondió Jesús: «El primero es: "Escucha, Israel, el Señor, nuestro Dios, es el único Señor: amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón, con toda tu alma, con toda tu mente, con todo tu ser." El segundo es éste: "Amarás a tu prójimo como a ti mismo." No hay mandamiento mayor que éstos.» 
El escriba replicó: «Muy bien, Maestro, tienes razón cuando dices que el Señor es uno solo y no hay otro fuera de él; y que amarlo con todo el corazón, con todo el entendimiento y con todo el ser, y amar al prójimo como a uno mismo vale más que todos los holocaustos y sacrificios.» 
Jesús, viendo que había respondido sensatamente, le dijo: «No estás lejos del reino de Dios.» Y nadie se atrevió a hacerle más preguntas.

Palabra del Señor

domingo, 28 de octubre de 2012

OCTUBRE 28 - DOMINGO XXX DEL TIEMPO ORDINARIO

UN CAMINO DE FE

El texto del Evangelio es rico en detalles para ver la obra de Jesús en un creyente.

La vivencia del Año de la Fe nos sirve de marco para hacer reflexión de la Palabra Dominical. Quisiera destacar, lo que llamaría, CARACTERÍSTICAS DE LA FE:

- HUMILDAD: Bartimeo se reconoce NECESITADO, tal vez no crecemos en la fe porque creemos que podemos hacer muchas cosas y Dios Nuestro Señor sólo vendrá a darnos algún empujón.

- DECISIÓN: Bartimeo no se dejó apaciguar por los otros, gritaba a Jesús y lo hizo con más fuerza. Estaba decidido a que Jesús lo escuchara. También 'de un salto' va donde Jesús, sabe lo que quiere ¿Cuántas veces perseveramos en alguna súplica?

- RENUNCIA: Bartimeo renunció a su medio de protección, su manto. Quizás en nuestro camino de fe hemos de dejar algo - alguien para lograr la sanación, la liberación. ¿Qué debo tirar?


LITURGIA DE LA PALABRA

Primera lectura
Lectura del libro de Jeremías (31,7-9):

Así dice el Señor: «Gritad de alegría por Jacob, regocijaos por el mejor de los pueblos; proclamad, alabad y decid: El Señor ha salvado a su pueblo, al resto de Israel. Mirad que yo os traeré del país del norte, os congregaré de los confines de la tierra. Entre ellos hay ciegos y cojos, preñadas y paridas: una gran multitud retorna. Se marcharon llorando, los guiaré entre consuelos; los llevaré a torrentes de agua, por un camino llano en que no tropezarán. Seré un padre para Israel, Efraín será mi primogénito.»

Palabra de Dios
Salmo
Sal 125,1-2ab.2cd-3.4-5.6

R/.
 El Señor ha estado grande con nosotros, y estamos alegres

Cuando el Señor cambió la suerte de Sión,
nos parecía soñar:
la boca se nos llenaba de risas,
la lengua de cantares. R/.

Hasta los gentiles decían:
«El Señor ha estado grande con ellos.»
El Señor ha estado grande con nosotros,
y estamos alegres. R/.

Que el Señor cambie nuestra suerte,
como los torrentes del Negueb.
Los que sembraban con lágrimas
cosechan entre cantares. R/.

Al ir, iba llorando,
llevando la semilla;
al volver, vuelve cantando,
trayendo sus gavillas. R/.
Segunda lectura
Lectura de la carta a los Hebreos (5,1-6):

Todo sumo sacerdote, escogido entre los hombres, está puesto para representar a los hombres en el culto a Dios: para ofrecer dones y sacrificios por los pecados. Él puede comprender a los ignorantes y extraviados, ya que él mismo está envuelto en debilidades. A causa de ellas, tiene que ofrecer sacrificios por sus propios pecados, como por los del pueblo. Nadie puede arrogarse este honor: Dios es quien llama, como en el caso de Aarón. Tampoco Cristo se confirió a sí mismo la dignidad de sumo sacerdote, sino aquel que le dijo: «Tú eres mi Hijo: yo te he engendrado hoy», o, como dice otro pasaje de la Escritura: «Tú eres sacerdote eterno, se gún el rito de Melquisedec.»

Palabra de Dios
Evangelio
Lectura del santo evangelio según san Marcos (10,46-52):

En aquel tiempo, al salir Jesús de Jericó con sus discípulos y bastante gente, el ciego Bartimeo, el hijo de Timeo, estaba sentado al borde del camino, pidiendo limosna. Al oír que era Jesús Nazareno, empezó a gritar: «Hijo de David, Jesús, ten compasión de mí.»
Muchos lo regañaban para que se callara. Pero él gritaba más: «Hijo de David, ten compasión de mí.»
Jesús se detuvo y dijo: «Llamadlo.»
Llamaron al ciego, diciéndole: «Ánimo, levántate, que te llama.» Soltó el manto, dio un salto y se acercó a Jesús.
Jesús le dijo: «¿Qué quieres que haga por ti?»
El ciego le contestó: «Maestro, que pueda ver.»
Jesús le dijo: «Anda, tu fe te ha curado.» Y al momento recobró la vista y lo seguía por el camino.

Palabra del Señor

domingo, 21 de octubre de 2012

OCTUBRE 21 - DOMINGO XXIX DEL TIEMPO ORDINARIO

JORNADA MUNDIAL DE LAS MISIONES



Sin misión, la Vida y la Palabra de Jesús la dejaríamos en silencio, el mundo necesita de Jesús, por eso que no falte la misión en la Iglesia del Señor

LITURGIA DE LA PALABRA

Primera lectura
Lectura del libro de Isaías (53,10-11):

El Señor quiso triturarlo con el sufrimiento, y entregar su vida como expiación: verá su descendencia, prolongará sus años, lo que el Señor quiere prosperará por su mano. Por los trabajos de su alma verá la luz, el justo se saciará de conocimiento. Mi siervo justificará a muchos, porque cargó con los crímenes de ellos.

Palabra de Dios
Salmo
Sal 32,4-5.18-19.20 y 22

R/.
 Que tu misericordia, Señor, venga sobre nosotros, como lo esperamos de ti

Que la palabra del Señor es sincera,
y todas sus acciones son leales;
él ama la justicia y el derecho,
y su misericordia llena la tierra. R/.

Los ojos del Señor están puestos en sus fieles,
en los que esperan en su misericordia,
para librar sus vidas de la muerte
y reanimarlos en tiempo de hambre. R/.

Nosotros aguardamos al Señor:
él es nuestro auxilio y escudo.
Que tu misericordia, Señor, venga sobre nosotros,
como lo esperamos de ti. R/.
Segunda lectura
Lectura de la carta a los Hebreos (4,14-16):

Mantengamos la confesión de la fe, ya que tenemos un no sacerdote grande, que ha atravesado el cielo, Jesús, Hijo Dios. No tenemos un sumo sacerdote incapaz de compadecerse nuestras debilidades, sino que ha sido probado en todo exactamente como nosotros, menos en el pecado. Por eso, acerquémonos con seguridad al trono de la gracia, para alcanzar misericordia y encontrar gracia que nos auxilie oportunamente.

Palabra de Dios
Evangelio
Lectura del santo evangelio según san Marcos (10,35-45):

En aquel tiempo, se acercaron a Jesús los hijos de Zebedeo, Santiago y Juan, y le dijeron: «Maestro, queremos que hagas lo que te vamos a pedir.»
Les preguntó: «¿Qué queréis que haga por vosotros?»
Contestaron: «Concédenos sentarnos en tu gloria uno a tu derecha y otro a tu izquierda.»
Jesús replicó: «No sabéis lo que pedís, ¿sois capaces de beber el cáliz que yo he de beber, o de bautizaros con el bautismo con que yo me voy a bautizar?»
Contestaron: «Lo somos.»
Jesús les dijo: «El cáliz que yo voy a beber lo beberéis, y os bautizaréis con el bautismo con que yo me voy a bautizar, pero el sentarse a mi derecha o a mi izquierda no me toca a mí concederlo; está ya reservado.» Los otros diez, al oír aquello, se indignaron contra Santiago y Juan.
Jesús, reuniéndolos, les dijo: «Sabéis que los que son reconocidos como jefes de los pueblos los tiranizan, y que los grandes los oprimen. Vosotros, nada de eso: el que quiera ser grande, sea vuestro servidor; y el que quiera ser primero, sea esclavo de todos. Porque el Hijo del hombre no ha venido para que le sirvan, sino para servir y dar su vida en rescate por todos.»

Palabra del Señor

domingo, 14 de octubre de 2012

OCTUBRE 14 - DOMINGO XXVIII DEL TIEMPO ORDINARIO

¿CUÁLES SON MIS IDEALES?

El texto del Evangelio de este Domingo es, a mi modo de ver, un texto triste; normalmente quien se acerca a Jesús encuentra paz, consuelo, sanación, una nueva opción de vida... Hoy alguien se acerca a Jesús y se va triste, claro está que no por Jesús, sino porque su corazón no alcanza a acoger lo que el Señor le propone.

Mirando el texto con detenimiento podemos notar que esta persona va presurosa a conversar con el Maestro, él ya va de salida de una ciudad y este personaje apura el paso para no dejarlo ir; se le arrodilla, y esto sólo se hace con quien se reconoce como valioso, digno de respeto, sólo con Dios; además lo llama 'Maestro Bueno'... Por estos elementos hemos de resaltar que el Señor Jesús es valorado.

Viene una pregunta trascendental, una inquietud básica para una persona con horizontes grandes: ¿Qué debo hacer para heredar la vida eterna? No es una pregunta por el más allá sin vinculación con el más acá, es una pregunta en la que se entreteje el todo de una vida, el sentido por el cual vivir, el valor de cada esfuerzo y de cada proyecto de vida. Preguntar por la vida eterna es cuestionarse por el horizonte máximo que sostiene cada pequeño esfuerzo. Esta persona es entonces inquieta, tiene un pensamiento profundo, no es alguien superficial.

Jesús le contesta que los Mandamientos son el camino más seguro para la Vida Eterna, con esto ratifica el Salvador la grandeza de estas orientaciones que ayudan a vivir mejor. Los Mandamientos, las Diez Palabras, no son una camisa de fuerza que coarta la libertad, no son una esclavitud para apagar la fuerza del corazón. El hombre inquieto muestra la altura de su vida al afirmar convencido que cumple los mandamientos, ellos son parte de su proyecto. Viene entonces la desvelación del corazón que el Mesias sabe hacer, sólo Él conoce la profundidad de la vida y le dice que a pesar de todo le falta una cosa: DEJAR LOS BIENES Y SEGUIRLO. La Vida Eterna la da Jesús, los mandamientos son camino hacia Jesús, con la consecuencia de no hallar mayor riqueza que Él, por eso se necesita dejar a un lado los bienes. 

Notamos entonces que el hombre 'frunció el seño', no se sintió en sintonía con las palabras de Jesús, su Mesías lo deja en silencio; no tiene más palabras y se vuelve triste. Jesús, con pesar también en su corazón, afirma que el apego a los bienes no deja a este hombre buscar el horizonte más grande. Lo tiene en la mente, lo ha procurado trabajar con los mandamientos, pero su voluntad está amarrada a los bienes, cree que su vida la aseguran ellos y por eso no progresa.

Nuestro mundo de hoy también tiene muchos ideales, deseos de libertad, defensa de los derechos humanos, paz mundial; pero todos estos anhelos se quedan como en el aire por la corrupción del dinero, por la bajeza de los sentidos por la desviada pasión, sea sexual o por las drogas, el alcohol... Deseemos que Jesús nos abra a grandes ideales para vivir mejor cada día.



LITURGIA DE LA PALABRA

Primera lectura
Lectura del libro de la Sabiduría (7,7-11):

Supliqué, y se me concedió la prudencia; invoqué, y vino a mí el espiritu de sabiduría. La preferí a cetros y tronos, y, en su comparación, tuve en nada la riqueza. No le equiparé la piedra más preciosa, porque todo el oro, a su lado, es un poco de arena, y, junto a ella, la plata vale lo que el barro. La quise más que la salud y la belleza, y me propuse tenerla por luz, porque su resplandor no tiene ocaso. Con ella me vinieron todos los bienes juntos, en sus manos había riquezas incontables. 

Palabra de Dios
Salmo
Sal 89,12-13.14-15.16-17

R/.
 Sácianos de tu misericordia, Señor.

Enséñanos a calcular nuestros años,
para que adquiramos un corazón sensato.
Vuélvete, Señor, ¿hasta cuando?
Ten compasión de tus siervos. R/.

Por la mañana sácianos de tu misericordia,
y toda nuestra vida será alegría y júbilo.
Dános alegría, por los días en que nos afligiste,
por los años en que sufrimos desdichas. R/.

Que tus siervos vean tu acción,
y sus hijos tu gloria.
Baje a nosostros la bondad del Señor
y haga prósperas las obras de nuestras manos. R/.
Segunda lectura
Lectura de la carta a los Hebreos (4,12-13):

La palabra de Dios es viva y eficaz, más tajante que espada de doble filo, penetrante hasta el punto donde se dividen alma y espíritu, coyunturas y tuétanos. juzga los deseos e intenciones del corazón. No hay criatura que escape a su mirada. Todo está patente y descubierto a los ojos de aquel a quien hemos de rendir cuentas.

Palabra de Dios
Evangelio
Lectura del santo evangelio según san Marcos (10,17-30):

En aquel tiempo, cuando salía Jesús al camino, se le acercó uno corriendo, se arrodilló y le preguntó: «Maestro bueno, ¿qué haré para heredar la vida eterna?»
Jesús le contestó: «¿Por qué me llamas bueno? No hay nadie bueno más que Dios. Ya sabes los mandamientos: no matarás, no cometerás adulterio, no robarás, no darás falso testimonio, no estafarás, honra a tu padre y a tu madre.»
Él replicó: «Maestro, todo eso lo he cumplido desde pequeño.»
Jesús se le quedó mirando con cariño y le dijo: «Una cosa te falta: anda, vende lo que tienes, dale el dinero a los pobres, así tendrás un tesoro en el cielo, y luego síguerne.»
A estas palabras, él frunció el ceño y se marchó pesaroso, porque era muy rico. Jesús, mirando alrededor, dijo a sus discípulos: «¡Qué difícil les va a ser a los ricos entrar en el reino de Dios!»
Los discípulos se extrañaron de estas palabras. Jesús añadió: «Hijos, ¡qué difícil les es entrar en el reino de Dios a los que ponen su confianza en el dinero! Más fácil le es a un camello pasar por el ojo de una aguja, que a un rico entrar en el reino de Dios.»
Ellos se espantaron y comentaban: «Entonces, ¿quién puede salvarse?»
Jesús se les quedó mirando. y les dijo: «Es imposible para los hombres, no para Dios. Dios lo puede todo.»
Pedro se puso a decirle: «Ya ves que nosotros lo hemos dejado todo y te hemos seguido.»
Jesús dijo: «Os aseguro que quien deje casa, o hermanos o hermanas, o madre o padre, o hijos o tierras, por mí y por el Evangelio, recibirá ahora, en este tiempo, cien veces más casas y hermanos y hermanas y madres e hijos y tierras, con persecuciones, y en la edad futura, vida eterna.»

Palabra del Señor

domingo, 7 de octubre de 2012

OCTUBRE 7 - DOMINGO XXVII DEL TIEMPO ORDINARIO

AL RESCATE DE LA FAMILIA

En este Domingo siento la fuerza de la Palabra que me invita a valorar - defender y animar al cuidado de la FAMILIA. Desde el libro del Génesis hemos de pensar en ella hacer parte del Plan de Dios y por las palabras de Jesús en el Evangelio sentimos confirmado el principio de no descuidar la célula de la sociedad.

Quiero poner en este blog un aparte de la homilía del Santo Padre al dedicar la Basílica de la Sagrada Familia en Barcelona (España), el 7 de noviembre del 2010:


La iniciativa de este templo se debe a la Asociación de amigos de San José, quienes quisieron dedicarlo a la Sagrada Familia de Nazaret. Desde siempre, el hogar formado por Jesús, María y José ha sido considerado como escuela de amor, oración y trabajo. Los patrocinadores de este templo querían mostrar al mundo el amor, el trabajo y el servicio vividos ante Dios, tal como los vivió la Sagrada Familia de Nazaret. Las condiciones de la vida han cambiado mucho y con ellas se ha avanzado enormemente en ámbitos técnicos, sociales y culturales. No podemos contentarnos con estos progresos. Junto a ellos deben estar siempre los progresos morales, como la atención, protección y ayuda a la familia, ya que el amor generoso e indisoluble de un hombre y una mujer es el marco eficaz y el fundamento de la vida humana en su gestación, en su alumbramiento, en su crecimiento y en su término natural. Sólo donde existen el amor y la fidelidad, nace y perdura la verdadera libertad. Por eso, la Iglesia aboga por adecuadas medidas económicas y sociales para que la mujer encuentre en el hogar y en el trabajo su plena realización; para que el hombre y la mujer que contraen matrimonio y forman una familia sean decididamente apoyados por el Estado; para que se defienda la vida de los hijos como sagrada e inviolable desde el momento de su concepción; para que la natalidad sea dignificada, valorada y apoyada jurídica, social y legislativamente. Por eso, la Iglesia se opone a todas las formas de negación de la vida humana y apoya cuanto promueva el orden natural en el ámbito de la institución familiar.


LITURGIA DE LA PALABRA

Lectura del libro del Génesis (2,18-24):

El Señor Dios se dijo: «No está bien que el hombre esté solo; voy a hacerle alguien como él que le ayude.» 
Entonces el Señor Dios modeló de arcilla todas las bestias del campo y todos los pájaros del cielo y se los presentó al hombre, para ver qué nombre les ponía. Y cada ser vivo llevaría el nombre que el hombre le pusiera. Así, el hombre puso nombre a todos los animales domésticos, a los pájaros del cielo y a las bestias del campo; pero no encontraba ninguno como él que lo ayudase. Entonces el Señor Dios dejó caer sobre el hombre un letargo, y el hombre se durmió. Le sacó una costilla y le cerró el sitio con carne. Y el Señor Dios trabajó la costilla que le había sacado al hombre, haciendo una mujer, y se la presentó al hombre.
El hombre dijo: «Ésta sí que es hueso de mis huesos y carne de mi carne! Su nombre será Mujer, porque ha salido del hombre. Por eso abandonará el hombre a su padre y a su madre, se unirá a su mujer y serán los dos una sola carne.»

Palabra de Dios
Salmo
Sal 127,1-2.3.4-5.6

R/.
 Que el Señor nos bendiga todos los días de nuestra vida

Dichoso el que teme al Señor 
y sigue sus caminos. 
Comerás del fruto de tu trabajo, 
serás dichoso, te irá bien. R/.

Tu mujer, como parra fecunda, 
en medio de tu casa; 
tus hijos, como renuevos de olivo, 
alrededor de tu mesa. R/.

Ésta es la bendición del hombre que teme al Señor.
Que el Señor te bendiga desde Sión, 
que veas la prosperidad de Jerusalén
todos los días de tu vida. R/.

Que veas a los hijos de tus hijos. 
¡Paz a Israel! R/.
Segunda lectura
Lectura de la carta a los Hebreos (2,9-11):

Al que Dios había hecho un poco inferior a los ángeles, a Jesús, lo vemos ahora coronado de gloria y honor por su pasión y muerte. Así, por la gracia de Dios, ha padecido la muerte para bien de todos. Dios, para quien y por quien existe todo, juzgó conveniente, para llevar a una multitud de hijos a la gloria, perfeccionar y consagrar con sufrimientos al gula de su salvación. El santificador y los santificados proceden todos del mismo. Por eso no se avengüenza de llamarlos hermanos. 

Palabra de Dios
Evangelio
Lectura del santo evangelio según san Marcos (10,2-16):

En aquel tiempo, se acercaron unos fariseos y le preguntaron a Jesús, para ponerlo a prueba: «¿Le es lícito a un hombre divorciarse de su mujer?»
Él les replicó: «¿Qué os ha mandado Moisés?»
Contestaron: «Moisés Permitió divorciarse, dándole a la mujer un acta de repudio.»
Jesús les dijo: «Por vuestra terquedad dejó escrito Moisés este precepto. Al principio de la creación Dios "los creó hombre y mujer. Por eso abandonará el hombre a su padre y a su madre, se unirá a su mujer, y serán los dos una sola carne." De modo que ya no son dos, sino una sola carne. Lo que Dios ha unido, que no lo separe el hombre.»
En casa, los discípulos volvieron a preguntarle sobre lo mismo. Él les dijo: «Si uno se divorcia de su mujer y se casa con otra, comete adulterio contra la primera. Y si ella se divorcia de su marido y se casa con otro, comete adulterio.»
Le acercaban niños para que los tocara, pero los discípulos les regañaban. Al verlo, Jesús se enfadó y les dijo: «Dejad que los niños se acerquen a mí: no se lo impidáis; de los que son como ellos es el reino de Dios. Os aseguro que el que no acepte el reino de Dios como un niño, no entrará en él.»
Y los abrazaba y los bendecía imponiéndoles las manos.

Palabra del Señor

sábado, 6 de octubre de 2012

OCTUBRE 6 - FIESTA PATRONAL DE LA ARQUIDIÓCESIS DE MANIZALES

NUESTRA SEÑORA DEL ROSARIO
PATRONA DE LA ARQUIDIÓCESIS DE MANIZALES
6 de Octubre de 2012

Mi muy querida Arquidiócesis de Manizales, celebró en este día su fiesta patronal. La Santa Misa fue presidida por el Sr Nuncio de Colombia, Monseñor Aldo Cavalli. Quiero poner las notas que me quedaron grabadas y que no quiero olvidar, pues creo nos sirven para la vida:

De la Virgen María hemos de aprender cuatro características para vivir bien el Año de la Fe:

- CASTIDAD: Vivir sólo para Dios, tanto si se es casado, soltero, ordenado o consagrado(a).

- 'PARA DIOS NADA ES IMPOSIBLE': Siempre hay que saber esperar en el poder de Dios, sea para dentro de poco, para un año, tres años, diez años, cien años, mil años... NADA ES IMPOSIBLE PARA ÉL.

- CONTINUIDAD: Nuestra historia se desarrolla en medio de la CONTINUIDAD Y LA DISCONTINUIDAD, el tiempo pasa, pasa rápidamente muchas veces. Qué es lo que queda??? Para que permanezca lo bueno es importante LA FIDELIDAD Y EL AMOR, siempre constantes en los valores, en los principios de vida.

- FE EN LA RESURRECCIÓN: Recordar siempre en la Victoria de Jesucristo sobre el pecado y la muerte. Cristo Jesús nos da fuerza para el bien, para la gracia, su victoria es esperanza para nosotros.

Si desean ver y escuchar la homilía, pueden ir por este link: http://www.youtube.com/watch?v=HC9RCbEZqWM&feature=player_embedded

domingo, 30 de septiembre de 2012

SEPTIEMBRE 30 - DOMINGO XXVI DEL TIEMPO ORDINARIO

CORTANDO CON EL MAL

Centrándonos en el Evangelio y sobre todo en los últimos versículos, pensemos si nos suena muy exagerada la posición del Señor Jesús: ¿No es muy sanguinario al pedirnos cortar un miembro nuestro?

Nuestra lectura atenta y devota de la Escritura nos muestra cómo Jesús no vacila al pronunciar estas palabras, esto nos tiene que invitar a reconocer que son Palabras serias. Jesús nos dice con firmeza: NO PODEMOS DEJAR CRECER EL PECADO, las referencias a la mano - el píe - el ojo, están unidas por la misma razón, si alguno de estos miembros nos hace pecar-apartándonos de Dios hemos de cortarlos. Preguntémonos: ¿Será exagerado el Señor? ¿No se debe permitir 'algo'de mal?

Pensemos esta palabra desde experiencias comunes: ¿cómo se cura un cáncer? Por lo que entiendo se necesita 'extirpar' el tumor, no se puede dejar nada de malo dentro de la persona, una quimioterapia, una radioterapia, son para acabar con ese elemento 'maligno', y así parezca 'benigno' también se debe 'arrancar'. ¿Qué hacemos con las partes malas de una fruta? También se arranca lo que esté podrido, o ¿quién se lo come? además de saber mal se expondría el consumidor a un malestar y hasta una grave enfermedad. También en las casas se aconseja muchas veces 'apartarse' de las malas compañías, pues son 'nocivas' para los hijos.En una sana sicología se orienta siempre en que no todo es conveniente, hay cosas que no se pueden ver, no se pueden oír, no se pueden tocar, etc.

Si en la vida ordinaria se evidencia que hay males de diverso tipo que se deben cortar, arrancar; cómo no leer desde esta óptica la Palabra Santa de Jesús. Jesús conoce el corazón humano a profundidad y es realista frente al mal que nos acecha y daña y quiere darnos unos consejos claros para evitar el mal mayor como es el apartarnos de la Vida Verdadera que es Dios N.S.

La Palabra de este Domingo debe ser una alerta: ¿Qué nos motiva a pecar? ¿Qué puede llevarnos a alejarnos del Señor Dios? No temamos seguir esta Palabra de Jesús y abrirla a todos sus horizontes, ser realistas: HAY COSAS QUE NOS DAÑAN, el Demonio y su obra que es el pecado siempre están acechando para enfermarnos el corazón. Confiemos en el Poder del Santo Espíritu que nos libera y ayuda a salir adelante.


LITURGIA DE LA PALABRA

Primera lectura
Lectura del libro de los Números (11,25-29):

El Señor bajó en la nube y habló a Moisés; tomó parte del espíritu que había en él y se lo pasó a los setenta ancianos. Cuando el espíritu de Moisés se posó sobre ellos, comenzaron a profetizar, pero esto no volvió a repetirse. Dos de ellos se habían quedado en el campamento, uno se llamaba Eldad y otro Medad. Aunque estaban entre los elegidos, no habían acudido a la tienda. Pero el espíritu vino también sobre ellos y se pusieron a profetizar en el campamento. 
Un muchacho corrió a decir a Moisés: «Eldad y Medad están profetizando en el campamento.»
Josué, hijo de Nun, ayudante de Moisés desde joven, intervino diciendo: «¡Señor mío, Moisés, prohíbeselo!»
Moisés replicó: «¿Tienes celos por mí? ¡Ojalá que todo el pueblo profetizara y el Señor infundiera en todos su espíritu!»

Palabra de Dios
Salmo
Sal 18

R/.
 Los mandatos del Señor son rectos y alegran el corazón

La ley del Señor es perfecta
y es descanso del alma;
el precepto del Señor es fiel
e instruye al ignorante. R/.

La voluntad del Señor es pura
y eternamente estable;
los mandamientos del Señor son verdaderos
y enteramente justos. R/.

Aunque tu siervo vigila
para guardarlos con cuidado,
¿quién conoce sus faltas?
Absuélveme de lo que se me oculta. R/.

Preserva a tu siervo de la arrogancia,
para que no me domine:
así quedaré libre e inocente
del gran pecado. R/.
Segunda lectura
Lectura de la carta de Santiago (5,1-6):

Vosotros los ricos, gemid y llorad ante las desgracias que se os avecinan. Vuestra riqueza está podrida y vuestros vestidos son pasto de la polilla. Vuestro oro y vuestra plata están oxidados y este óxido será un testimonio contra vosotros y corroerá vuestras carnes como fuego. ¿Para qué amontonar riquezas si estamos en los últimos días? Mirad, el jornal de los obreros que segaron vuestros campos y ha sido retenido por vosotros está clamando y los gritos de los segadores están llegando a oídos del Señor todopoderoso. En la tierra habéis vivido lujosamente y os habéis entregado al placer; con ello habéis engordado para el día de la matanza. Habéis condenado, habéis asesinado al inocente, y ya no os ofrece resistencia.

Palabra de Dios
Evangelio
Lectura del santo evangelio según san Marcos (9,38-43.45.47-48):

En aquel tiempo, Juan dijo a Jesús: «Maestro, hemos visto a uno que expulsaba demonios en tu nombre y se lo hemos prohibido, porque no es de nuestro grupo.»
Jesús replicó: «No se lo prohibáis, porque nadie que haga un milagro en mi nombre puede luego hablar mal de mí. Pues el que no está contra nosotros está a favor nuestro. Os aseguro que el que os dé a beber un vaso de agua porque sois del Mesías no quedará sin recompensa. Al que sea ocasión de pecado para uno de estos pequeños que creen en mí, más le valdría que le colgaran del cuello una piedra de molino y lo echaran al mar. Y si tu mano es ocasión de pecado para ti, córtatela. Más te vale entrar manco en la vida, que ir con las dos manos al fuego eterno que no se extingue. Y si tu pie es ocasión de pecado para ti, córtatelo. Más te vale entrar cojo en la vida, que ser arrojado con los dos pies al fuego eterno. Y si tu ojo es ocasión de pecado para ti, sácatelo. Más te vale entrar tuerto en el reino de Dios que ser arrojado con los dos ojos al fuego eterno, donde el gusano que roe no muere y el fuego no se extingue.»

Palabra del Señor

jueves, 27 de septiembre de 2012

SEPTIEMBRE 23 - DOMINGO XXV DEL TIEMPO ORDINARIO

EL SEÑOR JESÚS NOS REVELA NUESTRO CORAZÓN

La Sagrada Escritura es un inmenso regalo por parte de Dios N.S., por ella el mismo Dios se nos da a conocer, 'se revela'; podemos responder a la pregunta: ¿Quién es Dios? con la lectura de la Biblia. Pero como la Revelación pide también la acción humana, el Buen Señor nos muestra quiénes somos, a la pregunta por el ser humano, la Palabra Santa también nos contesta; por un lado, pone de manifiesto la grandeza de nuestro ser, somos creaturas de Dios y con más propiedad HIJOS SUYOS; pero también la Escritura nos muestra nuestras miserias, la que esconde un corazón que no se deja iluminar por Dios N.S.

El libro de la Sabiduría narra lo que esconde la 'gente sin consciencia' - 'los impíos', pone de manifiesto que su actitud crea destrucción, no puede ver la actuación justa, pues es regido por criterios de egoísmo que sólo hacen daño al otro. El apóstol Santiago también le quiere hacer ver a su comunidad, que hay una causa para sus males como es la envidia, ésta genera conflictos entre los creyentes, el ambiente de muerte que engendra el pecado se muestra en las pugnas, guerras, etc. El Evangelista Marcos, cuenta lo que conversaban los discípulos en el camino, sobre 'quién era el más importante', los seguidores de Jesús también dan señas del orgullo, la vanidad, el deseo de poder que se esconde en el corazón humano.

Estas situaciones que nos narra la Escritura se siguen dando, la Palabra Santa siempre es actual, y nos ayuda  a revisarnos precisamente en una serie de comportamientos y deseos que van en contravía de la propuesta de paz y vida que el Salvador nos quiere hacer; el  Evangelio nos presenta el contraste fuerte, Jesús ha hablado que es un Mesías distinto, no viene con poderío humano a salvar, viene con sencillez y hasta a exponerse a la muerte para abrir la puerta de la Redención, por su Resurrección, 'pero los discípulos no entendían'; a nosotros también nos es difícil comprender y vivir este camino de humildad que el Señor Jesús propone y vive.

Hoy dejemos resonar con fuerza la invitación de Jesús a seguir su lógica: 'Quien quiera ser el primero, que sea el último de todos y el servidor de todos'. Este consejo es un principio de vida, es un camino seguro hacia la Paz, hacia el fortalecimiento de las relaciones. Cuando somos conscientes que somos todos iguales y que hemos de estar al servicio de los otros, la sociedad va haciendo presente el Reino de los cielos. Jesús siempre dio ejemplo de servicio y entrega por nosotros, pidamos que el Santo Espíritu nos llene de su fuerza para tener los mismos sentimientos del Redentor.


LITURGIA DE LA PALABRA

Primera lectura
Lectura del libro de la Sabiduría (2,12.17-20):

Se dijeron los impíos: «Acechemos al justo, que nos resulta incómodo: se opone a nuestras acciones,nos echa en cara nuestros pecados, nos reprende nuestra educación errada; veamos si sus palabras son verdaderas, comprobando el desenlace de su vida. Si es el justo hijo de Dios, lo auxiliará y lo librará del poder de sus enemigos; lo someteremos a la prueba de la afrenta y la tortura, para comprobar su moderación y apreciar su paciencia; lo condenaremos a muerte ignominiosa, pues dice que hay quien se ocupa de él.»

Palabra de Dios
Salmo
Sal 53,3-4.5.6 y 8

R/.
 El Señor sostiene mi vida

Oh Dios, sálvame por tu nombre,
sal por mí con tu poder.
Oh Dios, escucha mi súplica,
atiende a mis palabras. R/.

Porque unos insolentes se alzan contra mí,
y hombres violentos me persiguen a muerte,
sin tener presente a Dios. R/.

Pero Dios es mi auxilio,
el Señor sostiene mi vida.
Te ofreceré un sacrificio voluntario,
dando gracias a tu nombre, que es bueno. R/.
Segunda lectura
Lectura de la carta del apóstol Santiago (3,16–4,3):

Donde hay envidias y rivalidades, hay desorden y toda clase de males. La sabiduría que viene de arriba ante todo es pura y, además, es amante de la paz, comprensiva, dócil, llena de misericordia y buenas obras, constante, sincera. Los que procuran la paz están sembrando la paz, y su fruto es la justicia. ¿De dónde proceden las guerras y las contiendas entre vosotros? ¿No es de vuestras pasiones, que luchan en vuestros miembros? Codiciáis y no tenéis; matáis, ardéis en envidia y no alcanzáis nada; os combatís y os hacéis la guerra. No tenéis, porque no pedís. Pedís y no recibís, porque pedís mal, para dar satisfacción a vuestras pasiones.

Palabra de Dios
Evangelio
Lectura del santo evangelio según san Marcos (9,30-37):

En aquel tiempo, Jesús y sus discípulos se marcharon de la montaña y atravesaron Galilea; no quería que nadie se entera se, porque iba instruyendo a sus discípulos. Les decía: «El Hijo del hombre va a ser entregado en manos de los hombres, y lo matarán; y, después de muerto, a los tres días resucitará.» Pero no entendían aquello, y les daba miedo preguntarle.
Llegaron a Cafarnaún, y, una vez en casa, les preguntó: «¿De qué discutíais por el camino?»
Ellos no contestaron, pues por el camino habían discutido quién era el más importante. Jesús se sentó, llamó a los Doce y les dijo: «Quien quiera ser el primero, que sea el último de todos y el servidor de todos.»
Y, acercando a un niño, lo puso en medio de ellos, lo abrazó y les dijo: «El que acoge a un niño como éste en mi nombre me acoge a mí; y el que me acoge a mí no me acoge a mí, sino al que me ha enviado.»

Palabra del Señor

domingo, 16 de septiembre de 2012

SEPTIEMBRE 16 - DOMINGO XXIV DEL TIEMPO ORDINARIO

¿HASTA DÓNDE SEGUIRÍA A JESÚS?


El capítulo VIII del Evangelista san Marcos al que hemos llegado nos pone a mitad de camino de la Revelación del Misterio del Hijo de Dios que el Santo Escritor desea hacer. Jesús es seguido por las multitudes con entusiasmo, esperan de Él la palabra que instruye y sana; llega el momento de preguntar a sus discípulos sobre qué conocen de su persona, qué imagen se han hecho, en la respuesta se puede notar que la gente y los mismos seguidores inmediatos lo unen a toda la tradición profética; sin embargo, Pedro da un paso importante, lo proclama como Mesías.

Jesús acepta al interior de su grupo este título; pero comienza a aclarar que su mesianismo es diverso: la persecución - la muerte - la resurrección son su estrategia, y 'les hablaba claramente sobre ello', añade Marcos. Qué Mesías tan extraño!¡, por eso Pedro reacciona y pretende persuadir a Jesús de evitar estas expresiones. Con fuerza el Salvador rechaza la propuesta de su apóstol y 'pone los puntos sobre las íes' para quien desee estar con Él: 'El que quiera salvar su vida la perderá'.

¿Cómo recibo yo estas palabras de Jesús? Pidamos la serenidad y sinceridad para meditar estas palabras del Hijo de Dios, san Marcos continuará su Evangelio mostrando que el Señor se va quedando solo, y así llega hasta la cruz. Seguir a Jesús pide toda la consciencia y disponibilidad para luchar, para enfrentar el mal, Él viene a realizar un drama en el que hay amor-odio; vida-muerte; su lucha por nosotros lo hace exponerse y su mismo destino nos afecta a nosotros.

SEÑOR JESÚS, AYÚDAME A SEGUIRTE CON CONFIANZA, Y CUANDO VENGA LA LUCHA DAME TU FUERZA PARA NO DEJARME VENCER, SINO CONTAR CON TU MANO PROVIDENTE.

LITURGIA DE LA PALABRA

Primera lectura
Lectura del libro de Isaías (50,5-9a):

El Señor me abrió el oído; yo no resistí ni me eché atrás: ofrecí la espalda a los que me apaleaban, las mejillas a los que mesaban mi barba; no me tapé el rostro ante ultrajes ni salivazos. El Señor me ayuda, por eso no sentía los ultrajes; por eso endurecí el rostro como pedernal, sabiendo que no quedaría defraudado. Tengo cerca a mi defensor, ¿quién pleiteará contra mí? Comparezcamos juntos. ¿Quién tiene algo contra mí? Que se me acerque. Mirad, el Señor me ayuda, ¿quién me condenará?

Palabra de Dios
Salmo
Sal 114, 1-2. 3-4. 5-6. 8-9
R/.
 Caminaré en presencia del Señor en el país de la vida.

Amo al Señor, porque escucha mi voz suplicante,
porque inclina su oído hacia mí
el día que lo invoco. R/.

Me envolvían redes de muerte,
me alcanzaron los lazos del abismo,
caí en tristeza y angustia.
Invoqué el nombre del Señor:
«Señor, salva mi vida.» R/.

El Señor es benigno y justo,
nuestro Dios es compasivo;
el Señor guarda a los sencillos:
estando yo sin fuerzas, me salvó. R/.

Arrancó mi alma de la muerte,
mis ojos de las lágrimas, mis pies de la caída.
Caminaré en presencia del Señor
en el país de la vida. R/.
Segunda lectura
Lectura de la carta del apóstol Santiago (2,14-18):

¿De qué le sirve a uno, hermanos míos, decir que tiene fe, si no tiene obras? ¿Es que esa fe lo podrá salvar? Supongamos que un hermano o una hermana andan sin ropa y faltos del alimento diario, y que uno de vosotros les dice: «Dios os ampare; abrigaos y llenaos el estómago», y no les dais lo necesario para el cuerpo; ¿de qué sirve? Esto pasa con la fe: si no tiene obras, por sí sola está muerta. Alguno dirá: «Tú tienes fe, y yo tengo obras. Enséñame tu fe sin obras, y yo, por las obras, te probaré mi fe.»

Palabra de Dios
Evangelio
Lectura del santo evangelio según san Marcos (8,27-35):

En aquel tiempo, Jesús y sus discípulos se dirigieron a las aldeas de Cesarea de Felipe; por el camino, preguntó a sus díscípulos: «¿Quién dice la gente que soy yo?»
Ellos le contestaron: «Unos, Juan Bautista; otros, Elías; y otros, uno de los profetas.»
Él les preguntó: «Y vosotros, ¿quién decís que soy?»
Pedro le contestó: «Tú eres el Mesías.»
Él les prohibió terminantemente decirselo a nadie. Y empezó a instruirlos: «El Hijo del hombre tiene que padecer mucho, tiene que ser condenado por los ancianos, sumos sacerdotes y escribas, ser ejecutado y resucitar a los tres días.» Se lo explicaba con toda claridad.
Entonces Pedro se lo llevó aparte y se puso a increparlo. Jesús se volvió y, de cara a los discípulos, increpó a Pedro: «¡Quítate de mi vista, Satanás! ¡Tú piensas como los hombres, no como Dios!»
Después llamó a la gente y a sus discípulos, y les dijo: «El que quiera venirse conmigo, que se niegue a sí mismo, que cargue con su cruz y me siga. Mirad, el que quiera salvar su vida la perderá; pero el que pierda su vida por mí y por el Evangelio la salvará.»

Palabra del Señor